Entradas

Mostrando entradas de junio, 2015

"Tus" posesiones, échalas de ti... mejor te es perderlas...

Imagen
Cuando hay algo, "propiedad" de la iglesia —un edificio, un campamento, un templo, una escuela, una cuenta bancaria o cualquier otra cosa—, que provoca a esta, o a algunos miembros, a codiciar el poder de decisión y el control económico para lograr algún fin, no importa que dicho fin sea "noble y santo", y no importa que se declare que es "para la gloria de Dios y la expansión del Evangelio", el destino de ese "algo", debería ser considerado a la luz de tres verdades: 1. Ese "algo" ha llevado a la iglesia al pecado de la codicia —y seguramente a pleitos y otros problemas—, que es ofensa a Dios y a los hermanos (Éx 20:17; Ro 13:9), 2. Ese "algo" se ha convertido en un ídolo, lo cual abomina nuestro Dios (Éx 20:4-6; Lv 26:1) y 3. Nuestro Señor Jesús dijo que si en nuestra vida existe algo que sea ocasión de caer en pecado, debemos desecharlo (Mateo 5:29-30). ¿Cuál es entonces el destino, necesario por obediencia y salu